Un universitario de Pozoblanco en silla de ruedas, fue desalojado de un pub. Ahora el dueño, rectifica

La situación se dio en el mes de noviembre del año pasado en el Pub irlandés Banagher de la capital cordobesa.

Tras una situación de injusticia y desigualdad vivida por una persona con discapacidad física, ligada a PRODE, que tuvo lugar en el Pub irlandés Banagher de la capital cordobesa en el mes de noviembre del año pasado, el dueño del local, pide disculpas.

José Andrés Jurado, natural de Pozoblanco y que vive en la actualidad en Córdoba por estar cursando sus estudios Universitarios, emitió en su momento una nota en la que expresaba lo sucedido, así como el hecho de haber interpuesto una denuncia:


"El pasado jueves día 14 de noviembre ya metidos en la madrugada del 15, entramos sin objeción al pub irlandés Banagher, en Costa Sol, Ciudad Jardín (Córdoba), yo, estudiante de Administración y Dirección de Empresas José Andrés Jurado García en silla de ruedas, natural de Pozoblanco, acompañado de mi compañero de piso, mi
hermano y unas compañeras de este.

Dentro Había muchos clientes, estaba lleno. Mientras las compañeras de piso de mi hermano iban al cuarto de baño, yo José Andrés, mi compañero de piso y mi hermano nos quedamos en un rincón para evitar molestar. Pero al cabo de quince minutos, el portero del establecimiento pasó adentro y se dirigió hacia donde yo estaba, para invitarme a salir de dicho pub “por mi integridad”, porque, según decía, habían tenido problemas unos días antes con la cuestión del aforo, evacuación y demás. Yo observé que el local estaba muy lleno, incluso con gente “bailando encima de las mesas, cuatro o cinco personas”.

En ese momento Tanto yo como mis acompañantes decidimos salir sin más, pero una vez fuera pedimos la hoja de reclamaciones al portero. Este, tras entrar dos o tres veces, se la trajo finalmente, y la cumplimentamos en la calle. Una vez rellena, requerimos la presencia del encargado para que la firmara; este salió a la calle, y una vez allí nos invitó a tomar algo para resarcirnos, pero no quisimos.

Precisamente, en ese momento yo me di cuenta de que continuaba entrando más gente al local de la que salía, a pesar de que, en teoría, nos habían dicho que estaba lleno y que por mi integridad debía salir; pregunte por este hecho al encargado, quien me respondió que “él tenía que dar de comer a su familia”.

He decidido interponer una denuncia penal por delito de discriminación, así como una denuncia ante la Oficina Permanente Especializada del Consejo Nacional de la Discapacidad".

Ahora el dueño del local pide disculpas a José Andrés por hacerle salir del pub, y hace un llamamiento al sector de la hostelería, con las siguientes palabras:

"RECTIFICAR ES DE SABIOS

Dirijo esta disculpa a José Andrés Jurado, persona a la que se le indicó injustamente que debía salir del local por ir en silla de ruedas, por supuestos motivos de seguridad y Por mi parte, y por parte de quienes trabajan en mi local, no existe ninguna clase de rechazo hacia las personas con algún tipo de discapacidad; para nosotros no existe diferencia alguna, y admiramos los muchos ejemplos de superación que protagonizan en su lucha por la igualdad.

Desde aquí, tras reflexionar sobre el incidente, hago un llamamiento como hostelero a nuestro sector, para que se siga comprometiendo a fondo con la accesibilidad de los locales y el cumplimiento de la ley. En realidad, una persona con movilidad reducida no supone ningún problema para la seguridad del local o su eventual desalojo; se trata, simplemente, de una persona con los mismos derechos y deberes que cualquier 

Todos merecemos ser tratados por igual, como iguales son la dignidad, los derechos y deberes de todas las personas”.