Crónica del recital de Bartolomé López "El Arenales" y Rafael Trenas, en el real Círculo de la Amistad de Córdoba

El pasado 8 de marzo , tuvo lugar un recital de arte Flamenco, en el Real Círculo de la Amistad de Córdoba, a cargo del socio de la Peña Flamenca Agustín Fernández de Pozoblanco, el cantaor Bartolomé López “El Arenales”, con motivo de su vuelta a los escenarios.

Esta es la crónica que nos trae el secretario de la Peña pozoalbense, Juan Antonio:

Para acompañarle y mostrarle nuestro cariño, fuimos casi un centenar de socios y socias de nuestra Peña flamenca así como buenos aficionados y nuestro Alcalde D. Santiago Cabello, así como directivos de otras Peñas flamencas y varios artistas.

En autobús y vehículos particulares, nos trasladamos a la capital de la Mezquita y nos dimos cita en el magnífico edificio del Real Círculo de la Amistad, que nos causó una grata sensación a los que no lo conocíamos por la belleza y exquisitez de sus pinturas, de su estructura y majestuosidad, quedando impresionados y muy agradecidos por haber tenido la suerte de asistir acompañando a nuestro socio y al maestro Rafael Trenas, artífice de dicho evento, y poder disfrutar de la belleza de un monumento tan elegante y extraordinario.

En cuanto a nuestro socio y amigo Bartolomé, estuvo cumbre y le demostró a los buenos aficionados cordobeses y socios del Círculo de la Amistad que asistieron al recital, que es un cantaor como la copa de un pino y que a sus casi 71 años, tiene un poderío en su voz y en su garganta inigualables, que ya quieran para sí muchos cantaores más jóvenes.

Todo el público cordobés asistente que no le había escuchado se quedó gratamente impresionado por su buen hacer, fuerza su honradez y su genuina forma de interpretar los cantes, que te embelesa, te atrapa y te transporta a una dimensión del cante distinta a cualquier forma de interpretarlo.

Bartolomé comenzó su repertorio cantando unos Tientos-Tangos titulados “Tierra de mi Andalucía”, con letras dedicadas evidentemente a nuestra querida Andalucía y a los trabajadores del campo. Después se templó y cantó por Soleá de Triana, rematando con Soleá Apolá.

Luego hizo Malagueñas, acordándose de D. Antonio Chacón y La Peñaranda. Luego hizo Milongas de la Pepa de Oro. Después cantó la Petenera chica y la grande de la Niña de los Peines. A continuación hizo Granaínas, acordándose de Manuel Vallejo y rematando con la Media de D. Antonio Chacón. Luego hizo una tanda de varios estilos de Fandangos Naturales, entre ellos del Palanca, el Piriri de Triana, del Chozas, del Peluso y del Niño Gloria.

Y finalizó el recital con un Pasodoble, a compás de Tanguillos, en el que por su forma de ejecutarlo, se podría decir que emula al gran Manolo Escobar.

Por su parte el maestro de la sonata Rafael Trenas, estuvo inconmensurable, haciéndole la cobertura musical perfecta en todo momento y llevándolo en volandas, dando la nota y el acorde perfecto en cada momento, sin quitarle ni una pizca de protagonismo al cantaor y haciéndonos disfrutar con sus falsetas, sus arpegios y trémolos, arrancando en numerosas ocasiones el aplauso del público asistente.

Al finalizar su actuación, el Sr. Presidente del Real Círculo de la Amistad de Córdoba, obsequió al cantaor Bartolomé Lopéz, una placa conmemorativa de éste evento.

Y acto seguido, despedimos a estos dos magníficos artistas, con un cariñoso e interminable aplauso, con el público puesto en pie.

Comentarios y fotografías: Juan Antonio, secretario de la Peña Flamenca, con la colaboración especial del socio D. Bartolomé Dorado.