La huelga de hambre de los encerrados de la Plataforma Unidos por el agua, comienza a hacer mella en su salud

 

Paco, Miguel, Pedro y María Eugenia están comenzando a notar los efectos de estar cuatro días sin comer. Ayer, lunes 18 de diciembre, les realzaron el primer reconocimiento médico, ya notan mareos y les van faltando las fuerzas.

A pesar de que llevan varios días sin dormir no paran de buscar que se reúnan las administraciones. Por ello, desde la plataforma les ha pedido que dejen de recibir a toda la gente que va a apoyarles, es un gesto precioso, pero necesitan mantener las fuerzas y sobretodo descansar un poco.

Estos cuatro días han sido estresantes, no han parado de dar entrevistas por teléfono o presenciales, incansables manteniendo su discurso una y otra vez, lo que hiciera falta.

El domingo recibieron a la secretaria del Partido Socialista en Córdoba, Rafaela Crespin y el sábado acudieron al acto donde recibieron el apoyo de cientos de ciudadanos.

Han puesto en riesgo su salud, con el único objetivo de conseguir que las instituciones con competencias se sienten cara a cara y arreglen de una vez por todas la situación, para que en la zona norte no nos volvamos a quedar otra vez sin agua potable. Crespin se ha comprometido desde el partido socialista a hacerlo, en el partido popular siguen callando. Aunque saben que las soluciones que ellos han aportado no son suficientes ni pueden ponerse en marcha si no llueven 300 litros. Para atajar este gravísimo problema, hay que unir fuerzas el gobierno central y la Junta de Andalucia que son los que tienen las competencias y los que tienen que solucionarlo.

Mientras tanto, los cuatro valientes siguen encerrados en el ayuntamiento de Villanueva de Cordoba a pesar que desde la misma plataforma Unidos por el Agua, se les ha pedido que abandonen ya.

Lo más importante es la salud de las personas y el objetivo principal lo han conseguido con creces, dar visibilidad al problema de agua en la zona norte de Cordoba.

Fuente: Plataforma Unidos por el agua